La Venezuela sin Chávez
Por Carlos Bauza - Noviembe 12, 2011
La decisión ha sido tomada en una fresca noche de otoño habanero entre aromas de tabaco, ron y masitas de puerco, mientras la luna como testigo mudo en el firmamento no sabe si callar y seguir arropando con su luz tan insigne momento. Ramiro Valdés el número tres en el gobierno de Cuba, en orden descendente después de Fidel Castro y Raúl Castro se convertirá de ahora en adelante y de forma oficial en el próximo presidente de Venezuela. En una decisión que durante los últimos 6 años han venido barajando tanto Fidel como Raúl siendo este último, dada las condiciones seniles de su hermano mayor, el que al final se ve obligado a tomarla, en esta noche habanera típica de otoño donde la briza fresca, casi fría nos permite disfrutar de la noche desde el jardín, sin que ninguna nube ose opacar son su presencia, la impactante luna llena que escoltada de estrellas parecieran ser los dueños del firmamento mas no dueños del futuro del país caribeño llamado Venezuela. Una decisión basada en la fase terminal del cáncer que agobia al otro Comandante y que más temprano que tarde partirá también en una noche como esta a codearse con los revolucionarios que ya están del otro lado del tiempo y que seguramente escoltaran su camino al más allá.
Raúl Castro usara su mejor ficha, su mejor hombre, el que por décadas lo ha acompañado y el que por cierto implanto en Cuba, tomando como maestros a la extinta URSS, el famoso y no por sus virtudes sino por su oscura eficiencia G2 cubano. Ramiro Valdez es el bien llamado cancerbero de la revolución castrista, él se ha hecho merecedor del terror que los ciudadanos cubanos le profesan, de hecho ni lo nombran por que nombrarlo para ellos significa la muerte, la cárcel, la tortura, el espionaje y cualquier otro método de supresión humana conocida por el hombre. No existe un cubano sobre la tierra que no sepa quién y de que es capaz Ramiro Valdez. Quien por cierto visita con frecuencia Venezuela de forma anónima aunque a veces se les ha escapado el dato a los militares venezolanos que terminan excusando su presencia con el pretexto de ser un experto ingeniero en temas eléctricos, cuando en realidad ha sido Ramiro Valdez el responsable en estos últimos años de implantar los sistemas modernos de control ciudadana a nivel tecnológico como lo es a través de internet, telefonía, radio, televisión, registros y notarías que tanto en Cuba como en Venezuela sirven para el control y el espionaje de todos los ciudadanos y en especial de la oposición.
En este momento del artículo se estarán preguntando por qué y cómo Ramiro Valdez puede llegar a ser presidente de Venezuela si estamos en pleno proceso de elecciones primarias y segura derrota de Chávez, si es que la enfermedad se lo permite, en las elecciones presidenciales en el 2012. La respuesta es muy simple. La enfermedad de Chávez o su muerte serán la excusa perfecta para que días antes de las elecciones se decrete la ausencia definitiva del presidente, quedando Nicolás Maduro como nuevo presidente constitucional de la república. Un títere, un presidente títere que ha sido escogido no por sus favores a la revolución, sino más bien por dejar hacer sin mirar a quien, a cambio de dinero fresco y en dólares. Nicolás Maduro, que se lleva muy bien con los militares venezolanos, la otra ficha del rompecabezas, a diferencia de Adán Chávez, el hermano del presidente y que en algún momento se pensó podría ser el elegido para este puesto. Nicolás Maduro, el muñeco perfecto, “el Indio ese” como de forma despectiva lo llama Raúl Castro, que distraerá a la opinión publica mientras se deja llevar de la mano por las decisiones que en la Habana se tomen y que pasara de la vicepresidencia, que en los próximos días le darán, a la presidencia en un proceso turbio y gris en la que se jugaran el futuro de la nación.
Será el decreto de ausencia definitiva del presidente Chávez por enfermedad o por muerte quien marque el futuro de Venezuela y que será usado para que el nuevo presidente constitucional, Nicolás Maduro tome la decisión de llamar a un referéndum nacional sobre la reforma del estado y la constitución. Restándole protagonismo a las elecciones presidenciales y a la oposición quien distraída no encontrará el camino ni el poder económico para poder competir contra la maquinaria del estado. Es aquí donde la figura de Ramiro Valdez se hace presente, al ser él, el cerebro detrás del cable de fibra óptica entre Caracas y la Habana, el cerebro detrás de las Cedulas de Identidad y Pasaportes venezolanos hechos en Cuba, el cerebro detrás del espionaje y las escuchas a la oposición y a los mismos chavistas, quien entonces ejercerá todo su control y hará parecer a través de las maquinas automatizadas de votación y la manipulación de la base de datos del REP como nuevo presidente y sucesor de Chávez y constitucionalmente electo en las elecciones presidenciales del 2012, a Nicolás Maduro con más del 60% de los votos válidos. Resultados que avalaran de forma inmediata y sin ningún tipo de complejo las Fuerzas Armadas Bolivarianas de Venezuela, quienes seguirán entonces gozando de la impunidad que les ha permitido enriquecerse obscenamente vendiendo su conciencia y su lealtad al mejor postor.
Si Cuba no se puede dar el lujo de perder los ingresos provenientes de Venezuela mucho menos los militares venezolanos se pueden dar el lujo de perder la impunidad con que han aprovechado para hacerse de grandes fortunas y del narcotráfico, compitiendo inclusive con carteles internacionales de la droga. Los militares venezolanos saben que sin Chávez sus días están contados y la justicia nacional e internacional ira por ellos. Si apoyaban a Adam Chávez, cuando se les puso a escoger entre él y Nicolás Maduro como Vicepresidente, sabían también que serían aniquilados por el extremismo chavista que lo acompaña por lo que decidieron apoyar a Nicolás Maduro que aunque no les simpatiza, los dejará hacer y deshacer sin importunarlos. De ahí en adelante los militares venezolanos pasaran de forma directa a la tutela de Ramiro Valdez quien será realmente su comandante en jefe, y los usara como hasta ahora los han usado para validar y legitimar las diferentes trampas que en los últimos 13 años el gobierno ha cometido en los numerosos procesos electorales. Quedando Venezuela nuevamente ante el mundo como un país democrático que escogió a un nuevo presidente apegado al régimen chavista por decisión popular aunque a los verdadero demócratas de la oposición y del mundo les desagrade.
Este plan maquiavélicamente planeado por los hermanos Castro y brillantemente ejecutado por Ramiro Valdez contará ahora con un elemento fundamental, las reservas internacionales de Venezuela en total y absoluto efectivo o en lingotes de oro solido a disposición y control de los cubanos. Inauditables y sin ningún tipo de control internacional porque el mismo Chávez firmo, previendo todo este escenario, la repatriación de las reservas venezolanas en oro y efectivo depositadas en bancos de Gran Bretaña, Suiza, Estados Unidos y Canadá y que serán traídas próximamente al país en un estimado de 40 vuelos de carga y cuyo destino final seguramente estará en su mayor parte en Cuba y el resto en Venezuela. El poder que da tener el control absoluto de los dineros del estado hace posible que se mantenga el régimen castrista, los acólitos miembros del ALBA y por supuesto de cualquier organización o movimiento terrorista internacional. Pudiéndose seguir comprando conciencias en la medida en que sea necesario para mantener las apariencias u obtener favores que permitan a la sonada revolución castrista llegar hasta donde nunca antes pensó llegar. Debemos entender que Cuba hace el aporte “ideológico” y Venezuela hace el aporte “económico” porque para los cubanos los venezolanos somos desagradables, somos mal vistos, indios como ellos nos dicen. Capaces de vender el alma al diablo con tal de unos cuantos pesos por lo que la invasión se hace sin disparar un solo tiro pero si mucho dinero, y que lo peor del caso es dinero de los mismos venezolanos.
Mientras todo esto ocurre entre gallos y medianoche los venezolanos seguirán como hasta ahora, imperturbables hasta que el próximo fin de semana largo les interrumpa la rutina o el imperio del DAME les tire algo para acallar los rumores, mientras la oposición de repente se dará cuenta que ha sido utilizada como el mayor trapo rojo de la historia. O es que ustedes creen que esta libertad de escoger los candidatos para las elecciones primarias y toda la festividad que se vive en el país han sido mera casualidad o falta de control del gobierno por verse perdido en las próximas elecciones. No, ha sido o mejor dicho, se ha dejado que suceda para mantener distraída a la población, ocupada en pensar que tal vez hay una luz al final del túnel y que la podrán alcanzar usando la MUD como trampolín para lograrlo. Es el tonto útil que se dejó utilizar para hacer creer lo que no es y lo que no sucederá porque como bien les he dicho en otros artículos, Fidel y Raúl Castro no ha estado 53 Años con su revolución por casualidad, ellos saben lo que hacen y aunque los veamos viejos y acabados más sabe el diablo por viejo que por diablo, así que cuidado, estamos en territorio muy pero muy oscuro y peligroso. Cuando la oposición despierte ya será tarde, ya el daño estará consumado y todos los poderes del estado, las fuerzas amadas nacionales, el ALBA, la UNASUR, la OEA y pare usted de contar, habrán respaldado y aplaudido al nuevo gobierno de Nicolás Maduro mientras uno que otro cantara fraude hasta que el cansancio los venza.
Y en aquella fresca y casi fría noche de otoño habanero, mientras Raúl Castro disfrutando en su mecedora del flan casero que tanto le gusta, conversaba largo y tendido con Ramiro Valdez que parecía leer en el humo de su habano cubano iluminado por la hermosa luz de la luna, el futuro del país caribeño llamado Venezuela, teniendo de fondo la música casi susurrante de Beny Moré.
La pregunta que siempre y cada noche me hago es ¿los dejaremos? Que cosa…
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Conozca los detalles del “Pacto de La Habana”
Ya son tres las reuniones en menos de dos semanas en las que coincidió el alto mando chavista con el dúo Raúl Castro, presidente de Cuba y Ramiro Valdés, vicepresidente de la nación antillana. El alto mando chavista estaría integrado por Nicolás Maduro, Vicepresidente Ejecutivo y designado como candidato a la presidencia de Venezuela por Hugo Chávez en caso de que éste no pudiese tomar posesión de su cuarto mandato; Adán Chávez, hermano mayor de Hugo Chávez y gobernador del Estado Barinas; Diosdado Cabello, actual presidente de la Asamblea Nacional y vicepresidente primero del Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv); Jorge Arreaza, yerno de Hugo Chávez y Ministro de Ciencias y Tecnología y Cilia Flores, Procuradora General de la Nación y miembro de la directiva nacional del Psuv.
Por iniciativa de Raúl Castro, y para “garantizar la sucesión a Hugo Chávez en paz y sin traiciones”, según el deseo del propio Hugo Chávez, en la ciudad de La Habana, Cuba, el alto mando chavista aceptó el tutelaje de Raúl Castro y de Ramiro Valdés en el llamado “Pacto de La Habana” en el cual se acepta que Hugo Chávez no asumiría la presidencia de La República, por lo que el 10 de enero de 2013 se declararía su “ausencia temporal” por causa sobrevenida para su nuevo mandato y la presidencia provisional de Venezuela la asumiría Diosdado Cabello, en su condición de nuevo presidente de la Asamblea Nacional elegido con la mayoría de votos consensuados del Psuv el 5 de enero de 2013. Al asumir la presidencia temporal de La República, la presidencia de la Asamblea Nacional recaería en la persona de la Primera Vicepresidenta Blanca Eéckhout.
El compromiso se extiende con la formación de un politburó de gobierno, en donde Nicolás Maduro sería nombrado Vicepresidente Ejecutivo en el nuevo gobierno provisional de Diosdado Cabello, si éste no se dedica desde ahora a su campaña electoral. Serían también miembros del Politburó los gobernadores de los estados Barinas, Adán Chávez, Trujillo, Gral Henry Rangel Silva; y estado Aragua, Tareck El Aissami, quienes serían la última instancia de gobierno, junto al presidente provisional y el tutelaje cubano de Castro y Valdés en la toma de decisiones del Ejecutivo Nacional y en el control interno de la estructura del Psuv. En política exterior, la prioridad será conservar y ampliar los pactos con China y Rusia, más la entrada al Mercosur, donde Brasil ejerce un indiscutible liderazgo.
Según el devenir de la salud de Hugo Chávez, la temporalidad de la presidencia de Diosdado Cabello, de un trimestre, podría ser prorrogada por tres meses más. En ese lapso de producirse la ausencia absoluta de Hugo Chávez a la presidencia, se convocaría a unas nuevas elecciones presidenciales con Nicolás Maduro como candidato del Psuv.
En La Habana han manejado la tesis de la “continuidad del actual gobierno”, defendida por la presidenta del TSJ Luisa Estela Morales, que insiste que la reelección de Hugo Chávez es la ratificación por 6 años más de su actual gobierno. Esta tesis no termina de imponerse por la precario de su base legal. En caso de prosperar, Nicolás Maduro continuaría como Vicepresidente con los mismos poderes delegados por Hugo Chávez en el decreto de fecha 9 de diciembre de 2012.
Las recientes declaraciones de Dilma Rousseff sobre la necesidad de observar una sucesión apegada a la Constitución Nacional le ha restado soporte a esta tesis, que en un principio era la preferida del dúo Castro-Valdés.
¿Cuál será el futuro de Diosdado Cabello después de ejercer la presidencia provisional de La República? Quizás en la Asamblea Nacional lo esperen con un serrucho.
Las próximas horas son decisivas en la forma final que tomará el “Pacto de La Habana”. En todo caso, este pacto fue celosamente delineado por el propio Hugo Chávez cuando decidió competir enfermo por la presidencia de Venezuela. (LP)